Mama Coca

Mi relación con la coca se remonta a la infancia, pues entre mis memorias mas tempranas está la de  mi bisabuela Anita y su planta de coca. Anita, además de tener la planta como ornamento – maravillosa, de un verde eléctrico – la usaba como infusión y también en maceración en alcohol, pues aseguraba que era un remedio eficaz contra los dolores de las articulaciones. Siempre, a pesar de las historias que escuchaba respecto a la planta, sentí un respeto e interés especial por ella, pero no fue sino hasta mucho tiempo después, gracias a alguien muy cercano quien la consumía a diario, que tuve la oportunidad de experimentar la planta y sus bondades y conocer su historia e increíbles beneficios desde un lugar mucho mas personal y profundo. Fue tal el amor que la coca despertó en mi que sirvió como base para el nacimiento de p o p o r a, proyecto que surgió a partir de una necesidad de reconectar con nuestras raíces, de investigar y resignificar, a  través de productos útiles y conscientes, ciertas plantas que, tristemente, están rodeadas de gran desconocimiento e ignorancia. Empezamos con la coca, pues nuestro vínculo cultural como colombianos es quizá mas fuerte con ella que con cualquier otra planta. 

Erythroxylum coca también conocida por diferentes pueblos como Ayú, Kuka, Yaat o Mama coca es una planta nativa de América del Sur, sagrada para las comunidades indígenas de la región Andina. Se estima que su uso se remonta a unos 3000 años atrás, pues hay registros de la planta dentro de las culturas precolombinas. Su valor tradicional es tan fuerte que dentro de las ceremonias religiosas se mantiene como elemento de adoración y como canal directo al plano espiritual. Se dice de la planta que fue el regalo de Manco Kapac, el hijo escogido del dios Sol, por lo cual, es a su vez, la ofrenda por excelencia a la Pachamama, la deidad asociada a la Madre Tierra. También está a la base de las interacciones sociales, pues une a las personas reforzando los lazos comunitarios, ya que compartirla es símbolo de gratitud y respeto. 

Sus beneficios a nivel nutricional son inmensos, tiene componentes que ayudan a metabolizar las grasas y los carbohidratos y un alto contenido en minerales, vitaminas y antioxidantes. También es una fuente poderosa de proteína vegetal y de calcio, lo cual podría, sin lugar a dudas, sustituir las fuentes animales de los mismos. Además, se le atribuyen usos analgésicos, digestivos y energizantes.

Personalmente, puedo dar fe total de sus beneficios. Cuando viajo a algún lugar donde la altura es mayor o hago alguna expedición de montaña, siempre llevo conmigo un poco. Es también mi mejor aliada al momento de escribir, ya que me mantiene concentrada, energizada y sobre todo, inspirada.  No en vano se dice de ella que potencia el don de la palabra, pues permite que nuestro pensamiento fluya y nos expresemos con elocuencia. Dentro de la tradición indígena, se dice de Mama Coca que endulza el corazón, haciendo énfasis especial en su uso terapéutico para mitigar los efectos de la depresión. Cuentan que trae sosiego en momentos de crisis; de gran dolor y enojo y que cura la tristeza.

A través de su uso, tanto en infusión como mascada, he notado que sus efectos se sienten de forma gradual y sutil, ya que debí primero “desintoxicarme” de otros estimulantes, como el café, cuyo efecto es mucho mas brusco, para realmente entender como la coca actuaba. Y solo fue cuabdo logré conectarme con la planta que sentí cada uno de sus efectos en mi cuerpo.

Las propiedades de la coca fueron publicadas en detalle por un grupo de investigadores de Harvard en 1975 en el estudio «Valor Nutricional de la Coca». Desde entonces, la demonización de la planta y la guerra absurda que algunos gobiernos han llevado en su contra, no ha permitido avanzar en materia de su conocimiento a nivel científico. Latinoamérica es la cuna de la coca. La planta se da de forma natural en diferentes geografías y territorios. Entendiendo entonces su poder histórico y cultural es inevitable pensar en ella como elemento de identidad. De igual manera, conociendo sus increíbles propiedades, existe un sinnúmero de formas a través de las cuales podríamos beneficiarnos de incorporarla en nuestras vidas de manera responsable y consciente.

Desde Yerbatería y p o p o r a. reconocemos que el camino para legitimizar el uso la planta y cambiar el estigma que la rodea es extenso y arduo, por lo cual te invitamos a que la conozcas de cerca. Solo a través de tu conexión personal con ella, podrás entender mejor su espíritu dulce y sanador. Te invitamos también a que converses con otras personas sobre Mama Coca y a que nos ayudes a dignificarla, dándole el lugar que se merece como alimento espiritual y fuente de conocimiento ancestral y milenario.

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